"El cuidado y el acompañamiento nos hacen humanos".

X Jornadas de Ética Asistencial en el Centro San Camilo.

Cuidado, hospitalidad, acompañamiento, ensanchamiento de vida, vulnerabilidad, valores...

Las X Jornadas de Ética Asistencial del Centro de Humanización de la Salud han tenido lugar este 8 de marzo con mucha fuerza, mensajes, retos y reflexión.

Seguidas presencialmente por cerca de 300 personas en el Auditorio del CEHS en Tres Cantos más cerca de un centenar online a través de You Tube, estas Jornadas, gratuitas, han puesto el foco en esta dición en el final de la vida.

Profesionales asistenciales, estudiantes, voluntarios y apasionados de la humanización de la salud, han nutrido hoy este foro académico y experiencial, especialmente fecundo.

PRESENTACIÓN Y PRIMER BLOQUE DE LA JORNADA

José Carlos Bermejo, Director del Centro San Camilo, y Laura Steegmann, Presidenta del CEA (Comité de Ética Asistencial) San Camilo, han abierto las Jornadas. Bermejo ha recordado la importancia de las competencias blandas y lo relacional en este contexto en el que todos, antes o después, nos vamos a ver inmersos. Precisamente lo valórico, lo relacional y emocional, va a ser una tónica repetida a lo largo del día.

Bermejo ha repasado los documentos del Magisterio en el mundo médico que son contrarios a la eutanasia. Ha hecho un guiño entrañable a quienes cuidan y a quienes sufren y desean más morir que vivir como viven...acogiendo el desafío para comprender lo que pueda haber tras o bajo ese deseo. Y ha hecho una invitacion a pensar con criterio propio para que aliviar el sufrimiento sea lo primero.

En el primer bloque de la mañana, se ha abordado el tándem "cuidado y acompañamiento" como "esencia de la humanización", a través de cuatro intervenciones.

El cuidado y el acompañamiento nos hace humanos. Perspectiva filosófica /antropológica/ relacional, ha sido el primero, con Francisco Javier Rivas, médico máster en bioética y en dirección y administración de servicios sanitarios.

Con Rivas Flores hemos refrescado numerosas ideas clave, como la importancia del cuidado, la hospitalidad y el acompañamiento al final de la vida. Cómo descubrimos la fragilidad y la vulnerabilidad del otro y que nos interpela, cómo el cuidado y acompañamiento son ontológicamente humanos, tareas con alta carga emocional que nos ensancha la vida.

El mundo valórico también está muy presente en las Jornadas, así como el reconocimiento de que el trabajo de equipo conjunto es necesario ("Si no podemos solos, tendremos que admitir que nos necesitamos unos a otros").  Y precisamente, esta actividad comunitaria precisa de una planificación de acompañamiento. 

Cuidar nos pone en contacto con la realidad, hemos recordado. Y si somos profesionales de la salud, cuidar bien es un compromiso ético que lleva a la excelencia no solo laboral sino relacional. 

Otra perspectiva del cuidado y el acompañamiento nos la ha brindado Antonio Martínez Maroto, doctor en Derecho y máster en Bioética, al dibujar el cuidado desde la nueva visión de la capacidad. Las instrucciones previas. 

Con Maroto hemos conocido cómo se ha implantado un cambio total de paradigma en torno a este campo, donde la incapacitación no existe ya, ni la figura del tutor para los mayores de edad. Ahora se reconocen más los Derechos Humanos y la capacidad jurídica de las personas. 

Maroto ha explicado qué son y para qué sirven las "instrucciones previas" ("testamento vital", "voluntades anticipadas"...) y cómo aún les falta "rodaje" práctico, ya que falta definición, cultura y conocimiento general entre la población.

La tercera perspectiva la ha ofrecido Xabier Azkoitia, teólogo, máster en counselling y duelo, responsable del SAE (Servicio de Atención Espiritual) del Centro San Camilo. Ha explicado el cuidado y el acompañamiento como una actividad planificada. Perspectiva asistencial: planificación anticipada de cuidados.

Xabier ha detallado elementos como el respeto a la libertad del paciente en el último momento de su vida, en qué consiste el "consentimiento informado", y cómo el conocer y compartir las preferencias en salud de una persona mayor tiene numerosas ventajas, como la mejora de la calidad de la asistencia, menos ansiedad y más desarrollo de la habilidad para influir en su cuidado médico, mejor ubicación al final de la vida, y el desarrollo adecuado de modelos de atención centrados en lo esencial.

Con Xabier hemos recordado claves como la autonomía, el afecto, la esperanza...

Finalmente, con la doctora Lourdes Iglesias, médico en la Residencia Asistida San Camilo y máster en bioética, hemos puesto el broche a la primera parte de las Jornadas, con la perspectiva de ¿Cómo cuidamos y acompañamos a los mayores? Institucionalización y atención a los mayores frágiles.

Con Lourdes hemos repasado ampliamente el ámbito de las competencias profesionales como deberes éticos, competencias "duras" y "blandas", y cómo estas últimas son vitales en este mundo "postpandemia", que necesita recuperar el humanismo y contemplar la realidad del hombre como un ser que también es vulnerable y dependiente.

Empatía como llave para facilitar el cuidado. 

La labor de equipo para cuidar y curar.

La necesaria formación constante y especialización de los profesionales. 

El recordar que cada residente es un "proceso vital". 

Y, muy inspirador, tener presente la obligación de NO hacer daño en el cuidado, algo que también engloba a no juzgar, no agredir, no infantilizar y sí aceptar su momento vital -y prestar enorme atención a la "narrativa" de cada persona, su biografía. 

SEGUNDO BLOQUE: ACOMPAÑAMIENTO EN LA PRESTACIÓN DE AYUDA PARA MORIR

Tras el coloquio y el descanso, donde los participantes han tenido la oportunidad de relajarse y disfrutar del stand de publicaciones especializadas del Centro de Humanización de la Salud, las Jornadas se han reanudado con este segundo bloque.

Acompañamiento en la prestación de ayuda para morir. 

Con Tayra Velasco, profesora de bioética en la Facultad de Enfermería, Fisioterapia y Podología de la Universidad Complutense de Madrid, estamos abordando la exposición del contenido de la LORE (la Ley Orgánica de la Regulación de la Eutanasia). Y estamos aproximándonos al Manual de Buenas Prácticas, analizando las implicaciones prácticas , marco de la objeción de conciencia en la Ley.

Tayra ha insistido en la necesidad de:

impulsar recursos en cuidados paliativos,

en que todos los profesionales sanitarios necesitan formarse en cuidados paliativos y en bioética para aproximarse al sufrimiento del otro con habilidades y experiencia de comunicación, incluidas las competencias blandas como la compasión.

Esa formación ayudará a los profesionales a tomar decisiones y cuidarse ante situaciones de angustia y estrés (ante presiones externas, que te supere la situación o por ejemplo la problemática añadida en situación de pandemia).

CONCLUSIONES

Las Jornadas han terminado a mediodía revisando entre todos las conclusiones, de la mano de Laura Steegmann y Rosa Ruiz (del departamento de investigación).

Estas Jornadas, gratuitas, cuentan con el apoyo de la Consejería de Familia, Juventud y Política Social de la Comunidad de Madrid.