La resiliencia influye en la evolución de la enfermedad, la calidad de vida y la supervivencia del enfermo de cáncer.

El día 24 de noviembre se han celebrado en Murcia las V Jornadas de Psico-oncología, organizadas por la Asociación Española contra el Cáncer de la misma ciudad. En ella, participaron los ponentes, Siro López, Migueli y José Carlos Bermejo, profesores y colaboradores del Centro de Humanización de la Salud

El día 24 de noviembre se han celebrado en Murcia las V Jornadas de Psico-oncología, organizadas por la Asociación Española contra el Cáncer de la misma ciudad. En ella, participaron los ponentes, Siro López, Migueli  y José Carlos Bermejo. Este último, en su conferencia, afirmó:
  • Los pacientes con cáncer se enfrentan a muchas situaciones de estrés (diagnóstico, información, tratamiento, efectos secundarios, temor a nuevos procesos…) Hoy en día, todos estos escenarios traumáticos pueden ser  mirados no sólo en términos de negatividad, sino de posibilidades (psicología positiva): no sólo resistir, sino aprender a crecer en la adversidad.
  • La prevalencia de trastornos psicopatológicos en pacientes con cáncer depende, entre otras variables, de la libertad en el afrontamiento. Y, está demostrado, que un afrontamiento negativo, aumenta la prevalencia.  Bajo el mismo nivel de estrés asociado al cáncer, las personas que afrontan favorablemente la sintomatología, aprenden y, en nuevas situaciones, se agobian menos por el aprendizaje evocado en el pasado.
  • El paciente oncológico resiliente ha aceptado su enfermedad. La aceptación se modula en correspondencia con el optimismo frente a la recuperación, el espíritu de lucha y la solución activa de problemas.
  • Asimismo, las diferencias en los niveles de apoyo social (o percepción de apoyo) para afrontar una enfermedad como el cáncer son importantes (familia, frecuencia de contactos sociales).  Y señaló algunas de las formas negativas de apoyo más comunes:
    • Críticas a las formas de afrontamiento del paciente (familiares jueces).
    • Minimización del impacto de la enfermedad.
    • Expresiones excesivas de compasión e ideas pesimistas en relación al futuro.
    • Evitar el contacto con la persona.
    • Ser demasiado  rudo y exigir una fortaleza física y emocional que la persona no puede mostrar.
    • Poca competencia profesional y poca formación.
En definitiva, José Carlos Bermejo planteó que “la resiliencia y el afrontamiento pueden influir en la evolución de la enfermedad, la calidad de vida y la supervivencia de la persona enferma de cáncer”.