Este taller está dirigido a cuidadores de personas mayores, enfermas o en situación de dependencia tanto en el ámbito familiar como profesional. Especialmente indicado para quienes enfrentan una sobrecarga emocional, estrés continuado o desgaste y buscan un espacio para el autonocimiento y la adquisición de habilidades para lograr un equilibrio saludable entre cuidar y cuidarse  Tomar conciencia del impacto emocional del cuidado, reconociendo las propias vivencias, necesidades y límites personales.

• Fomentar el autocuidado físico, emocional y espiritual como parte esencial del proceso de cuidar a otros.
• Reforzar la empatía y la escucha activa en la relación con la persona dependiente, desarrollando una mirada más compasiva y humanizada.
• Explorar recursos personales y comunitarios de apoyo, incluyendo herramientas de afrontamiento saludable, redes de apoyo y estrategias de resiliencia.
• Crear un espacio de expresión emocional y validación mutua, donde los cuidadores puedan compartir experiencias, dificultades y logros.
• Reconocer el valor y el sentido profundo del acto de cuidar, conectando con los motivos personales y las fuentes de motivación que sostienen el compromiso cuidador.