PELÍCULAS DESDE LA MISERICORDIA

Nos adentramos en la misericordia de la mano de  films excepcionales…

Por Peio Sánchez

El chico (EEUU, 1921) Charles Chaplin
El clásico entrañable de Chaplin que narra una historia donde compasión, ternura, paternidad, filiación y pobreza van de la mano. El vagabundo encuentra un niño abandonado que le transforma en un padre responsable aunque sin más recursos que su imaginación.

Faustina (Polaca, 1994) de Jerzy Lukaszewicz
Película polaca sobre Santa María Faustina Kowalska conocida como Apóstol de la Divina Misericordia. Religiosa sencilla, trabajó en el convento como cocinera, jardinera y portera. Allí vivió una profunda experiencia mística en torno a la misericordia de Dios que escribió un largo diario sobre su vivencia interior. Muere joven a los 33 años consumida con su participación en los sufrimientos del mundo y se convierte en un ejemplo del corazón compasivo.

La buena mentira (EEUU, 2014) de Philippe Phalardeau.
De Sudán, sumido en la pobreza y en una violenta guerra civil, huyen cuatro hermanos tras la muerte de familiares cercanos. Llegan a un campo de refugiados en Kenia donde permanecen 13 años hasta ser acogidos en EEUU. Allí se ven obligados a separarse, la chica es llevada a California y los chicos a Kansas. Son acogidos por una trabajadora social que les ayuda a integrarse. En la estela de “Profesor Lazhar” del mismo director un retrato de un camino de fraternidad traspasado por la misericordia.

De dioses y hombres (Francia, 2010) de Xavier Beauvois.
Obra maestra del cine espiritual nos muestra la historia de los monjes de la Abadía de Nuestra Señora del Atlas en Tibhirine (Argelia) que fueron asesinados por un grupo extremista. Cuando el perdón es más fuerte que la violencia.

Las vidas de Grace (EEUU, 2013) de Destin Cretton.
Grace trabaja como educadora en un centro de acogida para adolescentes en situación de riesgo social. Cuando ingresa en el centro Jayden, una joven rebelde y abandonada, Grace toma conciencia de  que también ella tiene que afrontar los problemas de su historia personal. Las debilidades afrontadas en común pueden ser una ocasión de gracia y el acompañante se ve acompañado. Sobre la reciprocidad del curar las heridas.

“Samba” (Francia 2014) de Olivier Nakache y Erik Toledano.
Alice que ha tenido que dejar su trabajo de alta ejecutiva a causa del agotamiento, se apunta como voluntaria a una ONG que presta su ayuda a personas inmigrantes. Un día conoce a Samba, un senegalés que siempre está envuelto en problemas. Ella busca recuperar su vida, él busca tener papeles y sus historias de cruzan de forma imprevisible. En la estela de “Intocable”, una nueva propuesta donde la empatía puede llegar más lejos.

“Mandarinas” (Estonia, 2013) de Zaza Urushadze.
Película estonia sobre la guerra. En 1990, estalla la guerra en una provincia georgiana que busca la independencia. Ivo, un estonio, decide quedarse, a diferencia del resto de sus compatriotas, para ayudar a su amigo Margus con la cosecha de mandarinas. Al comenzar el conflicto, dos soldados resultan heridos delante de su casa, e Ivo se ve obligado a cuidar de ellos. Pero cada uno es de un bando y de una religión. Una perla preciosa.

“Cartas al padre Jacob” (Finlandia 2009) de Klaus Härö .
Obra maestra sobre la compasión. El padre Jacob, viejo pastor casi ciego, ahora sigue a sus feligreses por carta. Leila, convicta por asesinato, llega a cuidar de él redimiendo la pena. Un encuentro donde todo es posible y donde dar la vida significa dar vida. Un icono de la misericordia entrañable. Imprescindible.

“Los miserables” (Reino Unido, 2012) Tom Hooper.
El musical en el cine. La última adaptación de los miserables nos vuelve sobre esta cadena de perdones. El obispo Myriel, Jean Valjean, Fantine, Cosette, Eponine hasta del alguna forma el inspector Javert. De los miserables a bienaventurados los misericordiosos. Para emocionar cuando todavía nos quedan cantos.

“Secretos y mentiras” (Reino Unido, 1996) Mike Leigh.
Una joven tras la muerte de sus padres adoptivos busca a su madre biológica. Resulta ser una obrera bastante amargada y enfrentada a su hija de toda la vida. En medio el hermano-tío, el mediador. Donde lo que más une no son las fortalezas sino las debilidades, no son las mentiras sino la verdad. La reconciliación es posible pero hay que dar el paso…